jueves, 3 de mayo de 2012

GÉNESIS: La creación


NT (texto bíblico): Al principio creo Dios los cielos y la tierra. La tierra estaba confusa y vacía y las tinieblas cubrían la haz del abismo, pero el espíritu de Dios se cernía sobre la superficie de las aguas. Continua el Génesis que Dios dijo “haya luz” y la luz se hizo y vio Dios que era buena y la separo de las tinieblas y llamo a la luz día y a las tinieblas noche (G1.1-3).

CM (comentario): Según estas primeras citas del Génesis, el mundo se crea en medio de las tinieblas. Cuando Dios crea los cielos y la tierra (el agua aparece como constituyente de la tierra) no hay sino oscuridad, de forma que Dios decide crear la luz y con ella tienen lugar el día y la noche. Sin embargo, el sol no se ha creado aún, ni la luna, ni las estrellas, con lo que el cielo o los cielos no son sino un espacio oscuro e indefinido, lo que no deja de ser cuanto menos contradictorio y confuso. Si entendemos como cielo el universo conocido o lo que se ve desde la tierra, hay estrellas y por consiguiente luz. Es evidente que el escritor profeta no interpreto bien los dictados de Dios o éste no tenia una idea clara de como hacer, en cuyo caso lo pondríamos en cuestión.

NT: El segundo día de la  creación Dios separo las aguas, las que estaban debajo del firmamento de las que estaban sobre el y vio Dios que era bueno (G1.6-8).

CM: Después de cada fase del proceso creativo, Dios descubre la bondad de lo creado y se anima a continuar con su proceso creador, así en el primer día vio que la luz era buena y en el segundo descubre que es buena la separación de las aguas que están por encima y por debajo del firmamento, aunque no sepamos bien que tipo de aguas son éstas que están por encima.  Quizás deberíamos dudar de Dios como un ser omnisciente, conocedor de todo lo existente y del porvenir.

NT: En el tercer día juntó las aguas de debajo de los cielos y dejo la tierra seca. Después hizo brotar la hierba verde y árboles frutales. En el cuarto día hizo Dios una lumbrera (el sol) para iluminar el día y otra lumbrera (la luna) para iluminar la noche (G1.9-14).

CM: Aquí observamos un sinfín de contradicciones, incorrecciones e incongruencias. Dios creo el sol y la luna después de las plantas, cuando sabemos claramente que éstas necesitan la luz del sol para nacer y reproducirse, no viven sin luz y como esto lo sabían igualmente los hombres primitivos, hemos de concluir que el escritor o escritores bíblicos eran unos ignorantes o unos irresponsables, en cuyo caso debemos preguntarnos como es que Dios eligió para revelar la forma en que creo el mundo a semejantes personas, en cuyo caso Dios se equivoco en la elección de sus portavoces que no supieron exponer claramente el calendario de la creación, salvo que no sea cierto que el Génesis fuese inspirado por Dios o Dios mismo es un camelo.

Por otra parte, ya en el primer día había creado la luz, por tanto no se sostiene esta narración de la creación. Sabemos que ninguno de los planetas existen antes del sol, por consiguiente no es posible que Dios creara primero la tierra, el agua y después las luminarias. Así pues, el escritor esta de nuevo equivocado, Dios por su parte no se ha podido equivocar y puesto que sabemos que no es como se relate en el Génesis, hemos de suponer que el creador no transmitió bien al profeta su proceso de creación o sencillamente esto es fruto exclusivo del escritor y Dios no tiene ningún tipo de responsabilidad en lo contenido en el Génesis, por consiguiente no se trataría de nada revelado por Dios.

Hay otra serie de incorrecciones, salvo que lo consideremos como un bello cuento, tales como que Dios creo las plantas. Podríamos admitir que Dios creo algunas plantas y no todas las existentes, puesto que también sabemos que tanto las plantas como los animales evolucionan y hay muchas especies vegetales y animales que han desaparecido y otras que han emergido a lo largo de millones de años. Hoy día sabemos bastante a cerca de la formación y evolución del planeta Tierra, de la aparición de las primeras especies vegetales y animales y  de su evolución. Es más, sabemos bastante del origen del universo y sabemos que la tierra en la que habitamos no es sino un planeta mediano, el único habitado dentro del sistema solar, que la tierra gira alrededor del sol, que este sol nuestro es uno mas entre millones de soles, que los soles o estrellas conviven dentro de estructuras mayores llamadas galaxias, cuyas dimensiones se miden en cientos y miles de años luz, que las galaxias se alejan unas de otras y que a su vez las galaxias se agrupan en cúmulos de galaxias. Sabemos bastante del origen del universo y todo lo que sabemos es incompatible con la idea de un Dios creador del universo. Las fuerzas que determinan las leyes que rigen el universo (gravitación universal, electromagnetismo, fuerza nuclear, …) se explican a través de la física y no de Dios.

La idea de la creación, tal como lo presenta el Génesis, aún considerando que los días no son de 24 horas, es inviable, por muy poderoso que sea Dios, puesto que no es posible que lo que no es sea.

NT: El quinto día creo Dios los animales que poblaran la tierra, los mares y los aires y ordeno que se multiplicaran (G1.20-25). Finalmente decidió Dios crear al hombre en el sexto día (G1.26) y el séptimo día descanso (G2.2).

CM: El séptimo día Dios descanso de la ardua tarea de la creación, lo que no seria propio de Dios, en el que no se le debería reconocer descanso, puesto que esto significa estar cansado, lo que no es sino una imperfección del ser, y Dios es un ser perfecto y por consiguiente incansable.

En lo que se refiere a la creación del universo, sabemos con bastante certeza que éste tiene una existencia al menos superior a trece mil millones de años desde la gran explosión (el Big Bang), que nuestro sistema solar se formo hace aproximadamente cuatro mil quinientos millones de años, que el planeta Tierra evoluciono desde una masa incandescente con temperaturas de miles de grados centígrados, que a medida que la tierra se fue solidificando se fueron creando las condiciones para la aparición de la vida. El planeta Tierra no fue como la vemos hoy ni será igual mañana, los movimientos sísmicos, la actividad volcánica, la evolución de las mareas demuestran que la Tierra es un planeta vivo, como todo lo que configura el universo, porque esta sujetos a unas leyes naturales, físicas, no divinas, demostradas científicamente, algunas de ellas cuestionadas parcialmente, porque en determinados nuevos entornos complejos son otras leyes las que rigen, pero esto no es mas que sucesivos avances en el conocimiento del universo del que formamos parte.

Por consiguiente la aparición de estrellas, sistemas solares, galaxias y demás objetos celestes no es sino consecuencia de la evolución de la energía y de la materia sometida a sus propias leyes físicas. Han pasado miles de millones años (por difícil que sea entender y aceptar esto para algunos) para que el cielo, el universo, del que contemplamos desde la tierra una minima parte en las noches de cielo limpio y oscuro, esa maravilla de puntos parpadeantes que giran todos alrededor de un eje imaginario que cruza los polos magnéticos terrestres y que pasa circunstancialmente por una estrella fija en el cielo del hemisferio norte que es la Polar, se haya configurado tal como lo vemos hoy día.

Las primeras especies vegetales aparecieron hace no antes de 250 millones de años y el primer homínido (el australopithecus) apareció hace 4 millones de años. Los primeros homo sapiens aparecieron hace 100.000 años.

Nada que ver con el relato del Génesis, ¿cuál es la verdadera historia del origen del universo?, al menos ésta última está demostrada científicamente y resulta mucho más verosímil, por mucho que los integristas bíblicos quieran mantener lo contrario. Así pues el Génesis no parece ser otra cosa que un cuento para niños, muy bello, pero un cuento.

¡Cuantos años costo al hombre descubrir que lo que se movía era la Tierra y no el cielo (que también se mueve, pero de forma imperceptible para nosotros)! ¡Cuantos años en reconocerlo! y ¡Cuantas vidas pagaron por esta creencia contraria a los principios religiosos! ¡Cuanta sinrazón en la defensa del inmovilismo de las ideas preconcebidas, enseñadas desde las iglesias, con intereses inconfesables!

Es difícil concebir la idea de la aparición del universo desde un espacio vacío, de la mano divina, de un ser superior omnipotente, omnipresente y omnisciente, como también lo es la idea científica del Big-Bang, es decir la primera explosión desde una masa concentrada de energía cósmica. Pero al menos a esta segunda conclusión se llega a través del razonamiento y de la investigación científica, del análisis de la luz, del conocimiento de la composición de la materia y de su naturaleza, del control de los gases, del manejo de la energía y de su transformación, de las leyes del movimiento, del descubrimiento de las fuerzas gravitatorias, electromagnéticas y nucleares, de los inventos del microscopio, del telescopio y del ordenador, de los viajes espaciales y de la capacidad del ser humano y de su naturaleza inquieta y no de lo escrito en unos libros antiguos, incongruentes y de autores desconocidos.

¿Qué queda aún por descubrir? ¿Hasta donde llegara el conocimiento?  ¿Existirán otros universos paralelos? ¿Viajaremos hacia el exterior de nuestro sistema solar? No hay límites al conocimiento como tampoco los hay a la libertad de pensamiento.  

El ser humano al estar dotado de inteligencia siente la necesidad de conocer y saber sobre el entorno que le circunda, la razón de los fenómenos de la naturaleza, ya sean atmosféricos, de la corteza terrestre o del llamado firmamento en los textos bíblicos, su propio origen y su destino ante la consciencia de su propia muerte. Para escudriñar en ello no dispone, inicialmente, de más instrumentos que sus propios sentidos corporales, mediante los cuales puede observar lo que le rodea y sacar sus propias conclusiones, la imaginación, que le da la capacidad de establecer distintos escenarios posibles para dar respuesta a lo observado y el miedo a lo desconocido. Aquí reside pues el origen de los mitos sobre la creación del universo y el origen de las religiones. Pero a lo largo de los siglos los hombres han descubierto nuevas herramientas que le permiten dar una explicación diferente a lo observado.

¿Por qué no cuestionar la existencia de un Dios único o múltiple, si todo apunta a que existe una explicación más natural, sin recurrir a fantasías inverosímiles? ¿Por qué no aceptamos que Dios no es necesario, como dice Stephen Hawking? Si hace siglos podía tener sentido ante la ignorancia del género humano, ¿porque seguimos en la idea de Dios, cuando todo apunta a que las cosas no tienen un origen divino, que existe una explicación natural, física, que es coherente, razonable y razonada?

Veamos esta otra historia del origen del universo:

En el principio fue el Big Bang, esto es, una gran explosión desde una acumulación exagerada de energía que dio origen a las partículas elementales, la explosión fue tan grande que se creo el espacio y el tiempo, y las partículas ocuparon el espacio y en el transcurso del tiempo las partículas chocaban entre si dando origen a partículas mas complejas, y aparecieron los primeros átomos de hidrogeno y estos se fueron acumulando creando grandes masas gaseosas que a medida que se concentraban fueron creando sistemas complejos, los átomos se concentraban y chocaban entre si formando numerosas estrellas, dentro de inmensas nubes (galaxias y nebulosas), en un proceso que no ha terminado aún, que sigue su curso y del que el sistema solar nuestro es un sistema mas de los muchos creados a partir de aquella primera explosión. Y con nuestro sol aparecieron planetas, formado por átomos más complejos, pero con menor masa que el sol, razón por la que giran alrededor de éste. Y la tierra, que en un principio era una masa incandescente se fue enfriando, dando origen a las cordilleras, a los océanos y con el transcurso de los años se fueron dando las condiciones para que aparecieran los primeros seres vivos en forma de bacterias, para mas adelante aparecer seres mas complejos hasta llegar a los primeros homínidos y por ultimo al hombre. Pero este proceso de creación no ha terminado, la tierra sigue activa, existen placas tectónicas que no están fijas, se mueven y provocan terremotos, hay inundaciones e irrupciones volcánicas. El sol sigue quemando hidrogeno hasta su agotamiento, momento en que aumentara su diámetro, la tierra se calentara y desaparecerá, el sol estallara y el proceso continuara, esto no será el fin del mundo sino el fin del hombre en la tierra.

¿Qué historia de la creación es mas verosímil, mas creíble, mas fundamentada? la de la creación bíblica, la de un Dios creador, o esta ultima soportada por la ciencia, fundamentada en el hallazgo científico a lo largo de siglos de investigación. Quienes niegan los descubrimientos científicos y aboguen por la primera de las hipótesis no pudiendo fundamentarla, no quieren conocer la verdad o están incapacitados para ello, por formación, por temor o por causas que solo ellos saben.

Notas:

Algunas especies de homínidos

- Australopithecus. Apareció en la tierra hace 4,2 millones de años y desapareció hace un millón de años aproximadamente. Habito en África.

- Homo habilis. Habito la tierra desde 1,9 millones de años hasta 1,8 millones. Andaba erguido y era omnívoro. Utilizaba herramientas de piedra.

- Homo erectus. Apareció hace 1,8 millones de años (otras fuentes creen que los primeros datos son de hace un millón de años) y desapareció hace unos 300.000 años. Andaba erguido, sale de África y emigra hacia Asia y Europa.

- Homo neardenthalis. Apareció hace 150.000 años, aunque algunas fuentes sitúan su origen hace 300.000 años e incluso más. En todo caso desaparece hace tan solo 30.000 años después de haberse extendido por Asia y Europa.
Convivió durante algunos miles de años con el Homo sapiens.

- Homo sapiens moderno. Aparecimos hace 40.000 años coincidiendo con el lenguaje.

Lecturas y videos recomendados:  

Sagrada Biblia. (1967. Decimonona edición). Biblioteca de autores cristianos. Editorial Católica. Madrid.

Charles Darwin (1998). El origen de las especies. Espasa Calpe. Madrid.

Stephen Hawking y Leonard Mlodinow (2010). El gran diseño. Editorial Critica. Barcelona.

John Maynard Smith y Eörs Szathmáry (2001). Ocho hitos de la evolución: Del origen de la vida a la aparición del lenguaje. Tusquets editores. Barcelona.

David Garfinkle y Richard Garfinkle  (2010). El universo en tres pasos: Del Sol a los agujeros negros y el misterio de la materia oscura. Editorial Crítica. Barcelona.

UNED (2010). Prehistoria. Las primeras etapas de la humanidad. Editorial Universitaria. Madrid.

Eduardo Punset (2008). Porque somos como somos. Editorial Santillana. Madrid.

Manuel Toharia (1998). Hijos de las estrellas: La respuesta de la ciencia a los enigmas del hombre y el universo. Ediciones Temas de Hoy. Madrid.

Eudald Carbonell y José María Bermúdez de Castro (2004). Atapuerca, perdidos en la colina. Ediciones Destino. Barcelona.

Michio Kaku (2009). Debate. Barcelona.

Carl Sagan (2000). Cosmos (videos). Track Media. Barcelona.

Stephen Hawking (2010). El universo de Stephen Hawking (videos). Track Media. Barcelona.

Pioneer Productions (2010). La historia del universo (videos). Track Media. Barcelona.       

1 comentario:

  1. Me parece una lectura interesante de la Biblia, tal vez la que se debería dar en las escuelas a los niños para que tuvieran la oportunidad de distinguir entre lo que es real y lo que es ficción, pero seguramente, en España, la iglesia católica se echaria encima del poder político, ( civil) queriendo imponer su sentido de la creación, para lo que hay que tener mucha FE, ingrediente principal para creerse la creación como la cuenta la Biblia.

    Buen trabajo y en el que espero que sigas profundizando.

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