sábado, 22 de octubre de 2016

DEUTERONOMIO: La permanente amenaza de las religiones

NT (texto bíblico): Cuando traigas a la memoria la bendición y la maldición que te propongo, y obedezcas la voz de Yavé, tu Dios tendrá misericordia de ti. Yavé te traerá a la tierra que poseyeron tus padres y volverás a poseerla y te bendecirá si guardas sus preceptos y mandatos. Si oyes el precepto de amar a Yavé, de seguir sus caminos y guardar sus mandamientos, decretos y preceptos, vivirás y te multiplicaras. Pero si no escuchas y te adoras a otros dioses iras a la ruina segura. Os propongo la vida y la muerte, la bendición y la maldición para ti y tu descendencia. (DEU. 30.1-20).
          
CM (comentarios): Así es Yavé, si después de tanta penuria, recapacitas, te arrepientes y vuelves a él, cumples con todo cuanto te imponga, te bendecirá, has vuelto al redil y volverás a ser dichoso (esclavo de Yavé). Pero, ojo, atención, mucho cuidado, porque si osas desviarte mínimamente del camino que te ha marcado serás condenado, porque en ti está elegir entre la vida (seguir a Yavé) o la muerte (no seguirle), extensivo a tus descendientes. Es la permanente amenaza en la que se sustentan las religiones monoteístas derivadas de la Biblia; solo que debe de tratarse de tres dioses diferentes a juzgar por los acontecimientos históricos vividos por ambas religiones.

NT: Dijo Moisés: Yo ya tengo ciento veinte años y me ha dicho Yavé que no cruzaré el Jordán. El cruzará delante y destruirá delante de ti a todas esas gentes y las heredarás. Josué pasará delante de ti y hará con Yavé con ellos como hizo Seón y Og, reyes de los amorreos, y con su tierra, destruyéndolos… y no temas, Yavé no te dejará ni te desamparará (DEU. 31.1-8).

CM: Extraordinaria calidad de vida la de Moisés para superar con creces el siglo de edad. Como mando supremo del ejército israelita va dando las instrucciones de marcha encomendada por el dios guerrero y cruel: “destruirá a toda esa gente”, desprecio a quienes no son judíos, desprecio a la vida ajena. Y expropiación de sus tierras, de sus casas y ganados y de todas sus propiedades, así pues matarás, robarás, saquearás, estos son los mandamientos de ésta religión. ¿Dónde ven la bondad, la clemencia o la generosidad de éste Dios al que veneran los judíos, cristianos y musulmanes?

NT: Escrita ésta Ley, entregándola a los sacerdotes y a todos los ancianos de Israel y mandándoles: Al fin de cada septenio… reunirás al pueblo y a todos los peregrinos que se hallen en tus ciudades leerás esta Ley, para que la oigan y aprendan a temer a Yavé y estén siempre atentos a cumplir las palabras de ésta Ley. Especialmente vuestros hijos que nada saben de ella (DEU. 31.9-13).

CM: Que nadie mantenga que las religiones monoteístas, basadas en los escritos del Antiguo Testamento, están inspiradas en el amor al prójimo, a su dios, o a la naturaleza, muy al contrario se sustentan en el miedo, en el temor a la ira de su dios, así esta escrito, religiones que irradian odio hacia quienes no profesan sus absurdos mandatos, un odio que se ha manifestado a lo largo de siglos, no solo hacia quienes no profesan creencias religiosas, sino entre las diferentes sectas que han surgido en sus senos por discrepancias en asuntos triviales, absurdos e intranscendentes bajo la luz de la razón.   
Los mismos textos dejan claro que el temor es un aprendizaje, es preciso recordar de vez en cuando este legado de Yavé para que nadie ose abandonar el camino trazado, por muy demoniaco que éste sea -empleando la propia terminología que dichas religiones conceden a lo que llevan dentro, dando a entender que el mal esta fuera de ellas y corresponde a seres inanimados que animan a los seres humanos a practicar el mal, cuando todo lo creado, ya sea animado o inaminado, material o inmaterial es obra de Yavé, el único dios, y por consiguiente creador del mal, que el mismo se encarga de propagar por la tierra justificándose en una supuesta desobediencia humana a sus designios-. Es preciso recordar, y sobre todo adoctrinar a los hijos en el temor a Dios y en el cumplimiento de su Ley teocrática. Que gran enseñanza, garantía de la pervivencia en las generaciones venideras de creencias tan estupidas. Que mejor manera de enseñar a creer en dios y en temer su ira que la ignorancia, que mejor conocimiento que dar por único conocimiento la palabra de Dios, lo escrito en “los textos sagrados” es la palabra de Dios, lo que dicen los sacerdotes, rabinos o imanes son la extensión de la palabra de Dios, pues son sus representantes en la tierra -de ahí la supuesta infabilidad del papa de Roma mantenida durante siglos o el teísmo en los países islámicos-.
Que la mujer no tuviera derecho a una educación fuera de las enseñanzas religiosas y del entorno familiar no es baladí, es asignar a la mujer el papel secundario y dependiente del hombre que establecen los llamados textos sagrados antiguos, extendido en los posteriores textos cristianos y coránicos, y que la sociedad (basada en la preponderancia del hombre) ha asumido hasta los tiempos presentes en los que aún se lucha por la igualdad de los sexos en las culturas occidentales y que permanecen en retroceso en las naciones de predominio islámico. Y este papel de la mujer restringido al entorno familiar le hace reproductora del esquema ideológico-religioso en el que la sociedad se sustenta. De forma que mujer y escuela (o ausencia de ésta) son las dos vías del proselitismo y adoctrinamiento de los niños y niñas como perpetuadotes de las viejas e irracionales creencias religiosas.


2 comentarios:

  1. Lo que no entiendo aun es cómo se sustentan en el tiempo estas construcciones monstruosas que son las religiones...

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  2. es entendible........el nivel CULTURAL de la mayoria de los pueblos AUN EN ESTAS EPOCAS DEL INTERNET de uno a 10 no llegan a 3

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