NT (texto bíblico): Cuando Moisés entraba en el
tabernáculo para hablar con Yavé, oía la voz que le hablaba desde encima, entre
dos querubines: cuando pongas las lámparas en el candelabro, ponlas de modo que
las siete alumbren hacia delante. El candelabro era todo de oro batido (Num.
7.89; 8.1-4).
CM (comentrios): ¿Veía Moisés a Yavé o solo le
oía? En cuanto a los querubines, que no mencionaban palabra alguna, simplemente
acompañaban a Yavé, debía verles Moisés, pues en caso contrario ¿cómo percibir
su presencia?
En cuanto al candelabro,
sorprende como Yavé esta pendiente del más mínimo detalle, como es la posición
de las velas. Ante esta preocupación del todopoderoso, me pregunto ¿a qué
dedicará su tiempo en estos momentos? Quizás decepcionado de su propia creación
nos ha abandonado a nuestra propia suerte. Dado que es todopoderoso no cabria
pensar que la causa de un hipotético abandono sea que esté ocupado en otros
menesteres, como pudiera ser la creación de otros mundos; porque esta fuera de
toda lógica, que quien siendo todopoderoso, se preocupe de cosas tan nimias y
sin embargo deje de lado la cantidad de miserias que observamos a diario en
nuestras vidas.
Pero, a decir verdad, el dios que
nos ofrece la Biblia
es más sanguinario y perverso que incruento y bondadoso. Lo sorprendente es
adorar a un dios tan egocéntrico, narcisista y tan preocupado en que le adoren.
NT: Establece Yavé como han de
purificarse los levitas. Haz sobre ellos una aspersión con agua expiatoria; que
pasen la navaja por todo su cuerpo. Y Arón ofrecerá los levitas en ofrenda ante
Yavé. Los levitas pondrán sus manos sobre la cabeza de los novillos y ofrecerás
uno en sacrificio por el pecado y el otro en holocausto a Yavé para la
expiación de los levitas…porqué son donados a mí enteramente de en medio de los
hijos de Israel…; pues todo primogénito de los hijos de Israel es mió, lo mismo
de los hombres que de los animales. Esto es lo que toca a los levitas de
veinticinco años hacia arriba, hasta los cincuenta, que serán cesados en sus
funciones (Num. 8.5-26).
CM: También aquí, cuando se
establece la forma en que los levitas, la estirpe elegida por Yavé como casta
sacerdotal, han de ser purificados antes de poder ofrendar los sacrificios; el
hacedor hace valer de nuevo sus derechos de propiedad sobre la casta sacerdotal
y los primogénitos de cualquier especie.
NT: El primer mes del año segundo
después de la salida de la
Tierra de Egipto, en el desierto del SINAB, dijo Yavé a
Moisés que celebren la Pascua
el día catorce de ese mes, entre dos luces, la celebrareis conforme a todas las
leyes y a todos los ritos que a ella se refieren. Algunos, estando impuros por
un cadáver no sabían que hacer y preguntan a Moisés, quien acude a Yavé, el
cual le responde que quien este impuro o de viaje celebraran la Pascua el día catorce del
segundo mes. En cambio si estando limpio o no estando de viaje, no la
celebrare, éste será borrado de su pueblo por no haber ofrecido a tiempo su
ofrenda a Yavé, y llevara sobre si su culpa (Num. 9.1-14).
CM: Moisés, siempre intermediario
entre Yavé y su pueblo, líder espiritual por mandato divino y muy a pesar suyo,
no sabe reaccionar ante las incomodas incertidumbres de sus compatriotas y ha
de acudir a Yavé para la resolución de dudas y conflictos, en esta caso, que
hacer en estado de impureza.
Yavé aprovecha, una vez más, para
advertir de las consecuencias del incumplimiento de sus mandatos, esto es, el
desprecio de su pueblo, el destierro, porque los mandatos de Yavé son de
obligado cumplimiento.
NT: El día que fue alzado el
tabernáculo, la nube lo cubrió y desde la tarde a la mañana hubo como un fuego
sobre el tabernáculo. Así sucedía constantemente, de día lo cubría la nube y de
noche la nube parecía de fuego. Cuando la nube se alzaba, partían los hijos de
Israel y allí donde se paraba la nube acampaban,… Fuesen dos días, un mes o un
año, mientras la nube se detenía sobre el tabernáculo, los hijos de Israel no
se movían… (Num., 9.16-23).
CM: La nube, en la que se suponía
que estaba Yavé, determinaba los movimientos de los israelitas en su travesía
por el desierto. La tardanza en partir dependía de la voluntad de la nube, a
través de la cual Yavé impartía las órdenes de parada y partida. Pobre Moisés,
líder espiritual y conductor de su pueblo hacia la tierra prometida, sin
capacidad decisoria, mero transmisor de los caprichos de su dios. Que hartazgo.
¿Qué razones tenia Yavé para someter a su pueblo a una travesía tan duradera,
en un lugar tan inhóspito como el desierto? Ponerlo a prueba, verificar la capacidad
de sumisión y de resistencia de su pueblo elegido para adorarle y hacerle
ofrendas.
NT: Dijo Yavé a Moisés: Hazte dos
trompetas de plata batida a martillo, que te sirvan para convocar la
congregación y para hacer mover el campamento (Num. 10.1-2).
CM: Yavé establece a continuación
el uso de las trompetas, el sonido de una sola trompeta se hará para convocar a
los príncipes jefes, el sonido de las dos será para convocar a toda la
asamblea. También se tocaran las trompetas como alarmas contra el enemigo, en
caso de alegrías, en los holocaustos y sacrificios y en las fiestas, con
diferentes toques. De nuevo observamos las múltiples cualidades del creador en
las cosas más mundanas. Grandioso Yavé.
Que Yaveé ni que mierda esto parece un cuento de locos metidos en COCAINA .
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